A comienzos de años, más específicamente entre fines de enero y principios de febrero, la Laguna de Gómez había sufrido una bajante histórica, cuando se podía cruzar caminando, con motivo de la llamativa escasez de agua.
Sin embargo, actualmente – gracias a las lluvias sostenidas – el agua llegó a cubrir gran parte de la superficie, alcanzando también la altura del primer escalón del espigón situado en el Balneario municipal lo que instala una luz de esperanza de cara a la temporada de verano.
En diálogo con Democracia, Fernando di Pierro, el presidente de la Sociedad de Fomento del Parque Natural Laguna de Gómez aseguró que el panorama es “alentador”. “Durante los últimos fines de semana hemos estado teniendo una concurrencia que no se había registrado en los últimos años; así que la expectativa es muy buena por suerte. Los días lógicamente acompañan por el clima. Además, con el advenimiento del agua, la gente comienza a acercarse”, indicó.
En ese sentido, detalló que el agua “está entrando permanentemente pero muy poco”. “A quienes les interesa el deporte náutico aprovechan el mínimo de agua para iniciar su actividad; está todo el mundo expectante para poder comenzar con ese tipo de prácticas”, sostuvo.
En cuanto a la actividad comercial confirmó que se ha registrado - en las últimas semanas – “un notable repunte”. “Esta llegada de mayor volumen de gente ha sido muy positivo para los negocios, las despensas, para la panadería; se han visto muy favorecidos”, remarcó.
El accionar de la Sociedad de Fomento
En relación a las actividades organizadas desde la Sociedad de Fomento, di Pierro explicó que las iniciativas se llevan adelante “durante todo el año”. “En tanto, en el verano nos enfocamos en los reclamos relacionados con el barrio y también sucede que, al llegar mucha gente de visita, nuestro rol es mediar o bien, intentar responder a las problemáticas que presentan tanto la gente estable como el turista”, detalló.
En relación al turismo, aseguró que “el factor del caudal del agua en la laguna, es determinante”. “Si tenemos niveles de agua en progreso y empieza a llegar el turismo, creo que el beneficio es bastante interesante. Además, si el alquiler retorna, también va a regresar la motivación para mejorar muchas de las casas que están dispuestas para esto”, señaló.
En ese sentido, aseguró que “respecto al año pasado”, el panorama “es mejor”. “Si bien no tengo una estadística de alquileres, a simple vista y por conocimiento, el escenario es mejor. Todos esperamos que regresen las buenas épocas, donde no había casas para alquilar. Siempre hay puntos para mejorar, pero en líneas generales el parque es un lugar hermoso y un atractivo turístico bárbaro”, expresó.
Volver a navegar
Desde la Asociación de Windsurfistas del Noroeste de Buenos Aires (Awinoba), Juan Martín Miquel aseguró que – en los últimos días – “se ha vuelto a navegar con un bajo nivel de agua”. “La actividad del kitesurf y del windsurf ha regresado pero muy poco. Los remos no han vuelto a meterse, porque acceder es un poquito más dificultoso ahora porque tenés unos metros más de costa, pero el panorama es prometedor”, sostuvo.
Y agregó que “al parecer, estaba llegando - por lo que teníamos entendido – un poquito de agua desde otras lagunas que tienen más nivel, pero ante el escenario que era bastante desalentador con semejante sequía histórica, que ahora estemos pudiendo disfrutar nuevamente del deporte, significa un antes y un después”.
“El fin de semana pasado tuvimos mucha actividad porque tuvimos la suerte de tener dos días seguidos de viento fuerte y lindo para este deporte”, destacó.
“El panorama es de incertidumbre”
Por su parte, el presidente del Club Náutico Junín, Amilcar Rustici, aseguró que el escenario se revirtió y que “si bien nos habíamos puesto muy contentos hace 15 días atrás porque el agua había empezado a subir, ahora - con la falta de lluvia – el caudal ha bajado, otra vez, cinco centímetros”.
“Estuve hablando con gente de hidráulica, viendo todos los pronósticos y no es muy esperanzador el tema de las lluvias. Nosotros ya habíamos empezado a preparar el club para una temporada con agua y ahora estamos otra vez con la incertidumbre, sin saber qué es lo que va a pasar. Lamentablemente no tengo ninguna esperanza de que tengamos un verano con agua. Ojalá me equivoque, pero para el club esto es un problema grande porque terminamos la pandemia y entramos en la sequía”, explicó Rustici.
Según expresó, el sentimiento que predomina es “de preocupación”. “Al ser un club que hace únicamente náutica, estamos muy, muy preocupados”, remarcó.
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